Patatas panadera con tomatitos cherry/ Sliced roast potatoes with cherry tomatoes

Estas patatas quedan realmente divinas y son adictivas. Os recomiendo que aumentéis un poco las cantidades porque no quedará ni miga. Están aromatizadas con orégano y romero: de-li-cio-sas. Además, llevan muy poquito aceite por lo que no resultan tan potentes como las tradicionales. Son ideales para acompañamiento de asados y guisos.

Ingredientes (6 personas como acompañamiento)

1/2 kg de patatas

12 tomatitos cherry

1 cebolla mediana

2 pellizcos generosos de orégano

3 ramitas de romero fresco

2 cucharadas de vino blanco

aceite de oliva

sal

Pelamos y cortamos la cebolla en rodajas de media luna. Es decir, partimos la cebolla por la mitad y vamos haciendo lonchas finitas. Lavamos y partimos los tomatitos cherry por la mitad. Pelamos y cortamos las patatas en lonchas finas. Nuevamente usé la mandolina de mi amiga Mari. Reunimos los demás ingredientes.

Untamos de aceite una fuente de horno bonita que podamos sacar luego a la mesa. Precalentamos el horno a 180 grados.

Colocamos una capa de patatas, la mitad de las que hemos preparado, solapando unas con otras. Distribuimos por encima la mitad de la cebolla. Ponemos equidistantemente la mitad de los tomates cherry. Salamos y espolvoreamos con un pellizco generoso de orégano. Echamos un chorrito, pequeño, de aceite por encima.

Volvemos a repetir la operación con las patatas, cebolla, tomatitos´y orégano restantes. Volvemos a salar, con precaución, y echamos otro chorrito de aceite y las dos cucharadas de vino blanco. Ponemos encima las ramitas de romero.

Tapamos bien la fuente con papel de aluminio y al horno con ella 1 hora. Pasado este tiempo, destapamos la fuente y la tenemos al horno, bajo el grill, 15 minutos, o hasta que los bordes de los tomatitos y de algunas patatas se hayan tostado.

Bon appétit!