Cake de plátano, chocolate y nueces /Chocolate banana cake

Otro cake para desayunos y meriendas de fácil elaboración y para chuparse los "finguerettes". Es una variante del banana nut bread americano con un toque suave de chocolate. Envuelto en papel de aluminio puede durar varios días. Digo que puede porque está tan rico que desaparecerá como por arte de magia.

Ingredientes

250 grms de harina

150 grms de azúcar

1 sobre de levadura Royal

1 pellizco de sal

100 grms de mantequilla derretida

2 huevos

3 plátanos maduros (unos 300 grms)

100 grms de chocolate en trocitos

20 nueces peladas y en trocitos (unos 100 grms)

Ponemos la mantequilla en un bol y la derretimos en un cazo o en el microondas. La dejamos enfriar.

Mientras tanto, abrimos las nueces y partimos el chocolate en trocitos. Podrían usarse también pepitas de chocolate. Pelamos los plátanos y los machacamos con un tenedor. Cuanto más maduros estén los plátanos mejor.

En un bol grande mezclamos la harina, el azúcar, la levadura y la sal. Le añadimos la mantequilla derretida (debe haberse enfriado totalmente) y los dos huevos batidos. Mezclamos con la batidora a velocidad lenta.

Añadimos entonces el plátano, las nueces y el chocolate y volvemos a batir a velocidad 1 para que se mezcle todo. 

Precalentamos el horno a 180 grados. Untamos de mantequilla un molde rectangular. Le colocamos en la base, a lo largo, un trozo de papel de horno. Untamos de mantequilla también el papel.

El molde debe ser grandecito porque necesitamos dejar unos 2cms para que el cake suba. Lo rellenamos con la masa. Le damos unos cuantos golpes en la encimera, agitándolo un poco. Así la masa se distribuirá uniformemente y no quedarán bolsas de aire.

Y al horno durante 55 minutos. Cuando lleve unos 25 es conveniente colocarle encima un trozo de papel de aluminio para evitar que la superficie se tueste en exceso. Está listo cuando al insertarle un palillo en el centro sale seco ( de pincho moruno son estupendos para este menester).

Lo dejamos enfriar en el molde 15 minutos y lo desmoldamos sobre una rejilla. Una vez totalmente frío ya está listo para comer:

Bon appétit!