Estamos en plena temporada de setas pero la receta que comparto hoy con vosotros puede prepararse en cualquier época del año. Me trajeron hace un tiempo unas maravillosas setas desecadas de mi adorada Italia y son las que he usado. Las setas desecadas también se encuentran aquí en grandes superficies. Son riquísimas y superapañadas para cualquier imprevisto. El truqui está en enjuagarlas antes de ponerlas a hidratar para poder aprovechar después el líquido que sueltan al volver a su ser. Ya sabéis que el risotto es meloso, no se trata de un plato en que el arroz quede suelto como en una paella. Le he añadido también unas almendras laminadas por aquello del contraste de texturas (algo se aprende con los programas culinarios de moda). No olvidéis que es mejor utilizar parmesano que hayáis rallado vosotros mismos. Es un plato rápido de hacer y muy resultón.
Ingredientes (6 personas)
100 grms de setas desecadas (ó 250 grms de setas frescas)
4 vasos de agua
2 vasos de arroz
75 grms de almendras laminadas
75 grms de parmesano rallado
sal
aceite de oliva
Empezamos calentando el agua para desecar las setas. Las lavamos primero para quitarles posible polvo y/o impurezas.
Las dejamos desecando durante una media hora. Después las ponemos a escurrir en un colador y pasamos el líquido a una cazuela. La ponemos a hervir con un pellizco generoso de sal.
Cubrimos de aceite el fondo de una cazuela grande. Rehogamos el arroz a fuego medio durante un par de minutos. Añadimos las almendras laminadas y volvemos a rehogar todo junto otro par de minutos.
Finalmente añadimos las setas escurridas y volvemos a rehogarlo todo junto.
Si usáis setas frescas, deberéis lavarlas (ya sé, no muy ortodoxo para los puristas) y trocearlas, y rehogarlas durante 5 minutos por los menos, en vez del par de minutos necesario para las desecadas.
A diferencia de otros arroces el risotto requiere que se le remueva constantemente y que se le vaya añadiendo el agua poco a poco. Se trata de ir añadiendo el agua a cazos, removiendo e incorporando bien el líquido antes de añadir el siguiente cazo. Haremos esto, a fuego medio, durante 15 minutos. Es momento entonces de añadir el parmesano.
Le damos unas vueltas para que se mezcle bien y separamos la cazuela del fuego.
Como veis, debe quedar algo caldoso. Cubrimos la cazuela con una tapadera o con un paño y lo dejamos reposar 5 minutos. Y listo para comer:
Bon appétit!
Te ha quedado un risotto de lo más rico.Yo lo hago con langostinos pero este lo tengo que probar.
ResponderEliminarBesos
Suena estupendo! Un beso.
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